“En México se venden alrededor de 8 millones de colchones al año, haciendo de nuestro país un mercado de los más competitivos a nivel internacional”, afirmó Carlos Martínez, director general de Sealy México. “Apenas un 20% de las piezas que aquí se comercializan son de una calidad premium. De este grupo, nuestra compañía tiene un 30% de participación”.
La firma vende aproximadamente entre 480,000 y 500,000 colchones cada año con un crecimiento de 20% en sus ventas en el primer trimestre de 2012; para Sealy, todas sus líneas están catalogadas como premium, con precios que van desde los 5,500 hasta los 20,000 pesos aproximadamente.
Sealy Internacional llegó a México desde los años 60 sólo como una empresa con licencia para vender sus colchones en el país, no para producirlos. Fue hasta 1996 que inició operaciones como una firma con presencia permanente en nuestro territorio.
Actualmente cuenta con aproximadamente 200 empleados a nivel nacional, además de una planta de producción en Toluca y almacenes en Monterrey y Guadalajara. Sus productos son comercializados en las principales cadenas departamentales, mueblerías y tiendas especializadas. También es avalada por la Sociedad Mexicana de Medicina del Sueño.
Al preguntarle acerca de su visión en torno al estado de esta industria en México, el directivo se mostró optimista.
“Este mercado entró en crisis a finales de 2008, perjudicado principalmente por los problemas financieros en Estados Unidos. Aquí en el país varias compañías que también participaban en la producción de colchones desaparecieron. No fue sino hasta la segunda mitad de 2011 que las ventas comenzaron a crecer”.
Carlos Martínez refirió que Sealy registró un crecimiento de 20% en sus ventas comparables del primer semestre de este año. “Pensamos seguir con este panorama y mantener este ritmo para los próximos meses. Con esto México puede retomar su liderazgo de crecimiento en América Latina”. México, junto a Estados Unidos y Canadá son los principales mercados para esta firma en el mundo.
“En México no hay una normatividad que defina qué es un colchón ortopédico. Como tal no hay una regulación del mercado; sin embargo no hay piratería. Hay casos en la frontera norte, por ejemplo, en que colchones que fueron regresados defectuosos por garantía de Estados Unidos, son vendidos como productos de medio uso aquí en el país”, dijo el directivo.
Actualmente Sealy promociona el Crown Jewel, un colchón que utiliza la tecnología del resorte Dual Suport System DSS, que da un soporte único para cada parte del cuerpo.
“Contar con un colchón que no esté duro en su superficie y tenga malas condiciones de fabricación, puede ser perjudicial para la salud, en especial para la circulación, la columna cervical y la parte lumbar”, agregó el ejecutivo
Para Carlos Martínez, México se encuentra a la altura de Estados Unidos y España con una “buena cultura del colchón” en términos generales por los materiales que los clientes escogen y el tiempo que tardan en cambiarlos; mientras que Brasil y Argentina son de los peor calificados en este sentido.