Panda Cheese es una marca de queso en Egipto. En 2010 esta campaña obtuvo plata en Cannes. Todo mundo ama los comerciales pero ¿Por qué? y ¿Por qué le funcionaron a la marca?
Lo ideal para un producto en el marketing es tener una ventaja diferencial, sin embargo qué sucede cuando no tenemos una… ¡Hay que crearla!
Panda Cheese lo hizo… a través de la publicidad. Todos ven en el panda por antonomasia, a un animal tierno, dulce, incluso abrazable, pero lo que hace esta campaña es dar un giro sorprendente y mostrarnos a un personaje hosco y rudo, en caso de que la gente no quiera comer su queso.
¿Cuál es el resultado? El oso se vuelve aún más entrañable porque nos resulta tremendamente gracioso e inesperado. El primer spot es una sorpresa, pero en los siguientes, ansiamos ver quién será la siguienta víctima y cómo le hará pasar un mal rato nuestro amigo el panda.
Panda Cheese desarrolló de este modo su ventaja diferencial, un “algo” que los otros quesos, sin importar su calidad o cualidades, jamás tendrán.
El secreto para después es saber llevar este diferenciador a todos los medios de la marca: tradicionales, puntos de venta, marketing directo, social media… aunque a decir verdad, ésa es la parte más sencilla. La verdadera magia del marketing es ¿Cómo crear un diferenciador?
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